2 sesiones de 2 horas
Taller en línea a través de Zoom
Horario: Martes de 18 a 20 hrs.
Fechas: 3 y 10 de diciembre
Costo: $700
Imparte: Andrea Reed-Leal
Andrea es investigadora interdisciplinar, escritora y ceramista. Es candidata a doctora en estudios hispanoamericanos en la Universidad de Chicago, donde investiga tecnologías textuales de Mesoamérica, como cerámicas, textiles y códices. Algunos de sus otros proyectos incluyen AGUAVIVA, estudio de cerámica en Tonanztinla, Puebla, y las ediciones El río que no vemos. Crónicas de Tizapán (ITAM, 2017) y Habitar la biblioteca (Biblioteca revelaciones, 2023). Es además autora de ensayos, cuentos y reseñas en revistas literarias, como Luvina, Letras Libres y Revista de la Universidad de México.
Descripción:
Este taller se plantea en dos sesiones como un espacio teórico y práctico para explorar el archivo de cerámicas de Mesoamérica desde una práctica literaria y afectiva. Haremos un recorrido por distintos archivos, catálogos y bibliotecas. La metáfora del rizoma nos ayudará a pensar la investigación como una práctica entrelazada, inconclusa, íntima y agrietada. Es decir, el archivo no sigue necesariamente una narrativa linear, no termina ni empieza en un lugar, sino que es fragmentario, centrífugo y poroso.
Una política afectiva es indispensable como metodología para aproximarnos al archivo, un enfoque que la academia tradicional suele considerar “no concluyente” o demasiado íntimo. Considerando que la investigación es una práctica siempre inconclusa y moldeada por encuentros interpersonales y el paisaje circundante, propongo examinar las implicaciones de hacer investigación como una práctica íntima a partir de mis reflexiones sobre el archivo de vasijas de barro mayas hechas para bebidas de chocolate. Tendremos también presentes reflexiones sobre el rizoma de Deleuze y Guattari y de investigadoras contemporáneas como Gabriela Wiener y Elvira Espejo Ayca sobre la relación íntima con la materia “arqueológica”.
Durante estas sesiones miraremos juntas el archivo, leeremos crónicas coloniales, armaremos estantes de objetos y haremos ejercicios para poner en práctica lo visto. La investigación como práctica artística implica una actitud de apertura, donde la identidad y las nociones de una misma siempre están en juego, lo que permite la especulación y la imaginación, y reconoce que, con mayor frecuencia, la investigación deja más preguntas abiertas que respuestas.